DUBÁI, Emiratos Árabes Unidos (AP) — Irán lanzó el lunes un ataque limitado con misiles contra una base militar estadounidense en Qatar , en represalia por el bombardeo estadounidense de sus instalaciones nucleares, pero indicando que estaba preparado para dar un paso atrás ante la escalada de tensiones en la volátil región.
Estados Unidos fue advertido por Irán con antelación y no hubo víctimas, dijo el presidente Donald Trump, quien desestimó el ataque como una «respuesta muy débil».
“Lo más importante es que lo han sacado todo de su ‘sistema’ y, con suerte, no habrá más ODIO”, publicó Trump en Truth Social.
Catar condenó el ataque a la base aérea de Al Udeid como una flagrante violación de su soberanía, espacio aéreo y derecho internacional. Catar afirmó haber interceptado todos los misiles menos uno, aunque no quedó claro si este causó daños.
Irán afirmó que la descarga coincidió con la cantidad de bombas lanzadas por Estados Unidos contra instalaciones nucleares iraníes durante el fin de semana. Irán también afirmó que el objetivo era la base porque se encontraba fuera de zonas pobladas.
El mayor general de Qatar, Shayeq Al Hajri, declaró que se dispararon 19 misiles contra la base que alberga el Centro de Operaciones Aéreas Combinadas, que proporciona el mando y control del poder aéreo en toda la región, así como la 379.ª Ala Expedicionaria Aérea, la mayor de su tipo en el mundo. Trump afirmó que se dispararon 14 misiles, 13 fueron derribados y uno fue liberado porque no representaba ninguna amenaza.
Sin embargo, la guerra de Israel contra Irán continuó , y el ejército israelí amplió su campaña el lunes para atacar sitios simbólicos de la teocracia del país.
Irán anunció el ataque por la televisión estatal mientras sonaba música marcial. Un subtítulo en pantalla lo calificó como «una respuesta poderosa y exitosa» a la «agresión estadounidense».
Justo antes de las explosiones, el presidente iraní Masoud Pezeshkian escribió en la plataforma social X: «No iniciamos la guerra ni la buscamos. Pero no dejaremos la invasión del gran Irán sin respuesta».
Informes previos sobre el lanzamiento de un misil contra una base que alberga fuerzas estadounidenses en Irak fueron una falsa alarma, según declaró un alto funcionario militar estadounidense. El funcionario, que habló bajo condición de anonimato por no estar autorizado a hacer comentarios públicos, indicó que los restos de un misil iraní defectuoso que apuntaba a Israel habían activado la alerta de un ataque inminente contra la base de Ain al-Assad.
Israel amplía la guerra para incluir objetivos simbólicos
En el undécimo día del conflicto, Israel e Irán intercambiaron ataques aéreos que se han convertido en una realidad para los civiles de ambos países desde que Israel inició la guerra para atacar el programa nuclear de Teherán, que avanza rápidamente.
Irán atacó a Israel con una andanada de misiles y drones, mientras que Israel afirmó haber atacado “objetivos del régimen y organismos de represión del gobierno en el corazón de Teherán”.
Pero los funcionarios israelíes insistieron en que no buscaban el derrocamiento del gobierno de Irán, su archienemigo desde la Revolución Islámica de 1979.
Los últimos ataques se produjeron apenas horas después de que el propio Trump mencionara la posibilidad de un cambio de régimen, un día después de haber insertado a Estados Unidos en la guerra con su ataque con bombarderos furtivos contra tres sitios nucleares iraníes.
“Si el actual régimen iraní es incapaz de HACER QUE IRÁN SEA GRANDE OTRA VEZ, ¿por qué no habría un cambio de régimen?”, preguntó en su sitio web Truth Social.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, describió más tarde a Trump como alguien que “simplemente planteaba una pregunta”.
Los ataques estadounidenses del fin de semana generaron temores de un conflicto regional más amplio. Irán afirmó que Estados Unidos había cruzado una línea roja muy grande con su arriesgada estrategia de atacar con misiles y bombas antibúnkeres de 13.600 kilos .
Israel pretende reducir la guerra en los próximos días, pero eso dependerá de los iraníes, dijo un funcionario israelí bajo condición de anonimato para discutir deliberaciones internas de alto nivel.
El resultado que Israel prefiere es que Irán acepte un alto el fuego y reinicie las negociaciones con Estados Unidos sobre su programa nuclear, afirmó el funcionario. Sin embargo, Israel está preparado para la posibilidad de una guerra de desgaste prolongada de baja intensidad o un período de «calma por calma», en el que vigilaría de cerca las actividades de Irán y atacaría si identifica nuevas amenazas.
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