Puerto Lempira es la cabecera municipal del departamento de Gracias a Dios, en la República de Honduras. Se le conocía como “Auya Yari”, que significa Playa Grande. El 5 de agosto de 1957 recibió la categoría de municipio.
Limita al norte con el mar Caribe, al sur con las montañas de Morcón, al este con la laguna de Aurata y el río Morocón, al oeste con los ríos Kruta y Segovia. Está situada a las orillas de la laguna Caratasca. Mide aproximadamente 8,063 kilómetros cuadrados (Km2) y tiene una población aproximada de 25,000 habitantes.
La Feria patronal de navidad en la Mosquitia hondureña, se celebra entre el mes de noviembre y finales de enero. Cuenta con 31 aldeas y 84 caseríos.
Tiene una altura de ocho metros sobre el nivel del mar (8 msnm), es un lugar fresco, bastante lluvioso, tropical y de transición. Las poblaciones étnicas que viven en este lugar son misquita, ladina y garífuna.
(Foto: Honduras.Com)
Las principales actividades económicas son: el cultivo de caña de azúcar, arroz, tubérculos, cacao, café y tabaco; crianza de ganado vacuno, equino, porcino y ovino; avicultura.
En Puerto Lempira se puede encontrar una gran variedad de atractivos turísticos como: la Biosfera del Río Plátano, el Parque Nacional Patuca, la Reserva Antropológica Tawahka y el Sistema Lacustre de Caratasca conforman el corredor biológico más extenso y complejo del país. Por lo tanto, se convierte en uno de los destinos turísticos prioridad para turistas nacionales y extranjeros, especialmente aquellos atraídos a la naturaleza. Así como también las extensas selvas de esa región las cuales se extienden hasta el vecino país de Nicaragua. Juntas conforman un extenso corredor biológico que representa el principal pulmón verde de Centroamérica.
Biosfera del Río Plátano
La biosfera del río plátano está localizada en la región costera del caribe hondureño. Tiene una extensión de 5,250 km² y abarca tanto montañas como tierras bajas de selva tropical con una gran biodiversidad.
Consta de muchas especies de mamíferos como ser: monos capuchinos, tigrillo o gato de monte, lince, jaguar, entre otros. Aves como tucán y guacamaya. Mamíferos acuáticos como manatí y otras especies como pitones y anacondas.
Asimismo, cuenta con árboles de más de 50 metros de altura y 69 sitios arqueológicos que ayudaron a descubrir la Ciudad Blanca. La extensión de la selva, las condiciones climáticas y la falta de referencias hace que la investigación de la reserva sea complicada.
(Foto: La Tribuna)
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