Unos 3,513 niños han retornado al país este informó hoy la titular de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia (Dinaf), Lolis Salas.
En ese sentido se detalló que los infantes retornados son procedentes de diferentes puntos fronterizos de Guatemala y México.
“Esos menores han sido identificados en los diferentes puntos fronterizos de Guatemala y México y en el marco de la pandemia a partir del 27 de marzo ingresaron unos 1,794 niños quienes después de ser atendidos en los centros de atención migratoria en Belén, en San Pedro Sula y aquí en Tegucigalpa, fueron acompañados directamente y ya retornaron a sus lugares de origen”, agregó.
De la misma manera se puntualizó que a los menores se les está brindando la atención y ayuda necesaria cuando retornan al país.
“De igual manera, se ha trabajado en el combate de esos altos niveles de estigmatización que han existido en contra de la población migrante”, dijo la funcionaria, tras indicar que “hablar de la política migratoria es parte del gran mandato que tiene la Dinaf”, recalcó.
Derecho
Por otra parte, la funcionara especificó que todos los niños tiene sus derechos los cuales deben ser respetados y cumplidos a cabalidad.
“Si pretendemos que los niños y familias no salgan del país, intentando frenar la migración irregular, es importante recordar que ante todo migrar es un derecho humano y a nadie se le puede limitar el derecho a movilizarse”, afirmó.
Sin embargo, Salas añadió que la migración es un derecho universal, no obstante es preocupante la cantidad de menores que son retornados a la nación.
“La movilidad humana es un derecho que le asiste a toda la población hondureña como a cualquier persona que vive en los diferentes países del mundo”, agregó.
“Lo que pasa es que la implementación de un proyecto exitoso que el gobierno de Canadá, ha ayudado a financiar a contribuido al fortalecimiento de la Dinaf y ha permitido que existan en los espacios municipales y locales en donde se trabaja fuertemente en los esquemas de prevención”, subrayó.
“Se prioriza a la familia como espacio primario de protección y es la que debe velar por la vida de los niños, esa es la responsabilidad que debe asistir a las familias hondureñas”, según Salas.
“Pero cuando es la familia la que pone en riesgo la vida de los hijos, el Estado es el que asume un nivel de tutela, por esa razón es que estamos trabajando con los diferentes municipios para que de una manera articulada promovamos de los derechos y en la restitución de aquellos derechos que han sido vulnerados”, finalizó.
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