TEGUCIGALPA, HONDURAS.
La madrugada de este 1 de noviembre pone en alerta a Ecuador. En Guayaquil y en Esmeraldas, dos de las ciudades más violentas del país, se registraron atentados criminales con explosivos. Esto sucede en medio de las alertas emitidas desde la Penitenciaría del Litoral, el reclusorio más violento del país, por posibles traslados de reos.
Además, la mañana de este martes se conoció que los presos de la cárcel de Esmeraldas han retenido a ocho guías de la prisión como forma de protesta ante los eventuales traslados de reos en la Penitenciaría.
Uno de los atentados de esta madrugada dejó a dos policías muertos. La Policía Nacional reportó sobre el deceso de los miembros de su institución en Twitter: “En la madrugada de hoy un patrullero fue atacado por delincuentes con armas de fuego, en este acto cobarde dos policías perdieron la vida”.
Los cuatro ataques con coche bomba sucedieron tres en Guayaquil y uno en Esmeraldas. Los vehículos con explosivos estaban en el sector de La Alborada, en Guayaquil, en la Unidad de Policía Comunitaria del lugar. El siguiente se reportó en una de las gasolineras en Pascuales, a 8 kilómetros del primer coche bomba y otro de los autos con explosivos estalló en el terminal terrestre de Pascuales. La estación está cerrada para investigaciones y no se reportaron heridos, según la Municipalidad.
Además de estos atentados se encontraron artefactos explosivos cerca de tres unidades de policía de Guayaquil y en dos barrios de la urbe, según reportó la cuenta Cupsfire que reporta información sobre emergencias. También, se registraron ataques a policías en dos sectores de la ciudad y la distribución de panfletos atribuidos a bandas criminales en los exteriores de un medio de comunicación.
COMENTARIOS