Sudáfrica superó los 300.000 casos confirmados de covid-19 la noche del miércoles, con el mayor número concentrado en el enclave comercial del país, Johannesburgo, y sus alrededores, informó el Instituto Nacional de Enfermedades Transmisibles (NICD).
A pesar del aumento en los casos, el número de muertos en todo el país sigue siendo bajo, dijo el NICD.
Ese alto número de casos y la baja tasa de mortalidad se refleja en países de todo el continente africano, dijo el Dr. John Nkengasong, director de los Centros para el Control de Enfermedades de África (África CDC) en una conferencia de prensa el jueves en Addis Abeba.
Nkengasong dijo que el aumento de casos registrados en todo el continente fue impulsado por la situación en Sudáfrica y un puñado de otros países.
“Nuestra pandemia se ha acelerado y está aumentando rápidamente, pero la pandemia en África es muy heterogénea”, dijo.
Nkengasong dijo que hubo un aumento del 23% en los casos nuevos en África, en gran parte debido a brotes en Sudáfrica, Egipto, Nigeria, Ghana y Argelia.
Dijo que era comprensible que los países africanos reabrieran sus economías, pero también pidió que se realicen más pruebas.
“No podemos permanecer encerrados para siempre. No luchas en una guerra al retirarte y quedarte a puerta cerrada. Tienes que salir y luchar contra el enemigo. No es una opción entre salvar vidas y salvar la economía”, dijo.
“Necesitamos aumentar las pruebas, debemos rastrear a los que están infectados y aislarlos y tomar medidas con el tratamiento adecuado”. El funcionario agregó que la participación de la comunidad era crítica para la localización y atención de contactos.
Nkengasong también llamó a todos los países africanos para asegurar el uso universal de mascarillas. “Todos deberíamos usar mascarillas en lugares públicos”, afirmó.
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