SAR: Honduras es el país con las exoneraciones más altas de la región 

SAR: Honduras es el país con las exoneraciones más altas de la región 

TEGUCIGALPA, HONDURAS. Honduras es la nación con mayor gasto tributario, es decir,  las exoneraciones más altas de la región, recordó ayer Miriam Guzmán, titular del Servicio de Administración de Rentas (SAR).

Lo anterior se traduce al 7 % del Producto Interno Bruto (PIB), «lo cual nos deja en absoluto una cifra cercana o superior a los 41 mil millones de lempiras, eso no puede ser posible», dijo a Stereo Noticias la funcionaria del SAR.

En ese sentido, es oportuno mencionar que más de un centenar de leyes avalan dichas exoneraciones, sin embargo, algunas se suspendieron de forma temporal para hacer una revisión de su impacto; no obstante, no se registran avances en las mismas.  En la actualidad, existen 10 decretos que eximen a la empresa privada del pago de impuestos; mientras que el sector energético es beneficiado con otros seis decretos.

Por otro lado, hay seis disposiciones especiales para las zonas libres, procesamiento industrial, régimen de importación temporal y zonas libres de turismo.

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Otros decretos 

En cuanto a incentivos de turismo existen otros tres decretos. Así también los rubros de la construcción, minería, agroindustria y empresas comerciales, se benefician con leyes similares.  Con la misma suerte corren  las organizaciones sin fines de lucro y las no gubernamentales, quienes cuentan con 20 decretos que contienen beneficios.

También, están en vigencia 21 decretos que otorgan amparos al Cuerpo Diplomático y organismos y agencias internacionales; sumado a ello, están seis disposiciones que libran a las iglesias de los cargos tributarios.

Por otro lado, Guzmán sostuvo que el SAR «no podemos negar que tenemos una fase que es coercitiva que es el pago de impuestos a todos aquellos que no lo han hecho de manera apropiada así que la garantía es “no perseguimos a nadie”.

«Porque perseguir es sinónimo de violación y nosotros no podemos hacerlo porque somos funcionarios públicos que tenemos un límite que es la ley, porque insisto, si nuestro accionar fuera abusivo o violento, entonces estaríamos incurriendo en un abuso de autoridad», concluyó la funcionaria.

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