Rumanía aplicará a partir de la semana que viene el estado de emergencia para intentar contener la expansión del coronavirus o COVID-19, uniéndose así a países de la región como Bulgaria, que ya lo hizo, ayer viernes, y que ha aprobado penas de prisión a quienes se salten la cuarentena.
El presidente rumano, Klaus Iohannis, anunció durante este sábado que la medida entrará en vigor “al comienzo de la semana que viene”, en un momento en el que se contabilizan ya más de 100 casos en el país.
El estado de emergencia permitirá al Gobierno rumano destinar con más rapidez más dinero a la compra de medicamentos y equipamiento para combatir este virus.
Mientras, el Parlamento búlgaro ya decretó ´desde ayer viernes el estado de emergencia hasta el próximo 13 de abril y aprobó varias reformas legales.
Entre las que destacan imponer hasta cinco años de cárcel a las personas infectadas que no respeten las órdenes de cuarentena.
El jefe del equipo especial para la lucha contra el virus ha pedido al Gobierno búlgaro que cierren todas las tiendas a excepción que se dedican a los rubros de alimentos, farmacias, los bancos y gasolineras.
De momento, están en vigor condiciones extraordinarias de higiene para los comercios y tiendas, en las que se limita el número de clientes que pueden estar dentro a la vez.
Según medios internacionales, Bulagria contabiliza 41 casos y han perdido la vida dos personas por el COVID -19.
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