La provincia canadiense de Quebec anunció este martes que los residentes que hasta ahora se han negado a recibir la vacuna contra el covid-19 tendrán que pagar una multa en las próximas semanas como forma de contribuir al sobrecargado sistema de salud pública.
“En este momento, estas personas suponen una carga muy importante para nuestra red de atención médica, y creo que es normal que la mayoría de la población pida que haya una consecuencia”, dijo el primer ministro de Quebec, François Legault, en una conferencia de prensa el martes. “También es una cuestión de justicia para el 90% de la población que hizo algunos sacrificios, y creo que les debemos este tipo de medida”.
La multa no se aplicaría a aquellos con una exención médica y no se han anunciado detalles, aunque el primer ministro dijo que la cantidad que se impondrá sería «significativa».
El gobierno de Quebec dice que si bien casi el 90% de los quebequenses elegibles han recibido al menos una dosis de la vacuna contra el covid-19, los no vacunados siguen siendo una carga para el sistema de salud pública de la provincia.
Casi una cuarta parte de todos los canadienses viven en Quebec, y aunque la provincia fue una de las primeras en el país en introducir un pasaporte de vacunas, los funcionarios de salud pública dicen que la gran mayoría de los pacientes en los hospitales de Quebec siguen sin vacunarse. Los funcionarios no dieron un porcentaje específico de cuántos pacientes hospitalizados con covid-19 no estaban vacunados.
La semana pasada, Quebec anunció que los residentes ahora tendrían que vacunarse para comprar alcohol o cannabis, y el ministro de salud afirmó en las redes sociales que, como resultado, las vacunas aumentaron.
“En solo unos días, las citas para la primera dosis pasaron de 1.500 por día a más de 6.000 ayer. Gracias a todos los que decidieron vacunarse. No es demasiado tarde para recibir su primera dosis. Protéjase”, publicó en Twitter Christian Dubé, ministro de salud de Quebec, después de retuitear una historia periodística sobre el aumento de las vacunas aplicadas.
Quebec ya requiere prueba de vacunación para comer en restaurantes, ir al gimnasio o asistir a eventos deportivos y ha tenido algunas de las medidas de salud pública más restrictivas en América del Norte, incluido un toque de queda nocturno que se impuso por segunda vez durante la pandemia el mes pasado.
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