Once días tienen 23 nicaragüenses de vivir bajo el sol en el puente El Amatillo, a 137.3 kilómetros al sur de la capital de Honduras (85.3 millas).
STN informó en primicia sobre estos ciudadanos hace una semana y media, pero las autoridades migratorias no les dan todavía el salvoconducto para que puedan entrar a su país.
Estas personas ya habían cumplido 48 días de cuarentena en El Salvador, luego fueron enviados a Honduras con un permiso y ahora están retenidos.
Los extranjeros montaron pequeñas covachas de plástico para protegerse del sol y hacen sus necesidades a la intemperie.
En El Salvador hay cientos de migrantes nicaragüenses que se quedaron sin trabajo y buscan regresar a su país para pasar el aislamiento por el COVID-19, pero las autoridades hondureñas no los dejan pasar.
Hasta el momento, el gobierno de Daniel Ortega solo reporta 10 casos positivos de COVID-19 y dos fallecidos.
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