ESTADOS UNIDOS.
Las elecciones presidenciales de 2024 continúan siendo las más disputadas del siglo en Estados Unidos, y también la contienda más reñida por la Casa Blanca en seis décadas.
Las encuestas realizadas desde el debate del 10 de septiembre entre Donald Trump y Kamala Harris indican que, aunque la vicepresidenta ha logrado una ligera ventaja a nivel nacional, la carrera sigue siendo muy ajustada y dentro del margen de error. Esto es especialmente evidente al considerar el Colegio Electoral.
El hecho de que ninguno de los candidatos haya alcanzado al menos 5 puntos de ventaja en esta elección es notable, ya que es algo extremadamente inusual. En contiendas que terminan siendo muy ajustadas, generalmente uno de los candidatos logra obtener en algún momento una ventaja considerable. Sin embargo, este año, la mayoría de los votantes parecen estar firmemente decididos.
Para encontrar una elección en la que los candidatos de los principales partidos se mantuvieran siempre dentro de los cinco puntos de diferencia en el promedio de encuestas nacionales, hay que retroceder a la campaña de 1960. Desde entonces, en todos los años presidenciales ha habido al menos tres semanas en las que uno de los candidatos lograba una ventaja mínima ventajas de punto.
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