TEGUCIGALPA, HONDURAS.
Antes de casarse en 2009 tras tres años de noviazgo, el deportista estadounidense Tom Brady y la top model brasileña Gisele Bündchen firmaron “un acuerdo prenupcial inflexible” que permitió que su divorcio se resolviera rápidamente.
Si bien el jugador de los Tampa Bay Buccaneers, de 45 años, como la supermodelo, de 42, son increíblemente ricos por separado, el acuerdo prenupcial permitió la rápida división de sus bienes.
“Hubo un acuerdo prenupcial blindado establecido antes de que se casaran en 2009. Ambos tienen sus propias empresas comerciales separadas, por lo que la separación de su patrimonio no fue tan complicada al final. El único otro factor importante fue dividir su enorme cartera de propiedades”, dijo una fuente cercana a la ex pareja a Page Six.
Se estima que Brady se quedará con la mansión de 17 millones de dólares que se encuentra actualmente en construcción en el “búnker de los multimillonarios” en Indian Creek Island, en Miami. Compraron la propiedad en 2020 y la demolieron.
The New York Post informó que antes de su divorcio, Bündchen compró discretamente su propia casa en Miami Beach, una modesta propiedad de tres habitaciones y tres baños por USD 1,25 millones. Mientras tanto, Bündchen, de 42 años, también conservarÍa su hogar en la Península de Nicoya en Costa Rica, donde regularmente vacaciona con sus hijos.
COMENTARIOS