El Gobierno de Corea del Sur dijo el domingo que el país está conteniendo la tercera ola del nuevo coronavirus tras haber registrado el número de infecciones más bajo en casi cuatro semanas después del endurecimiento de las restricciones durante las fiestas de Año Nuevo.
El sábado se reportaron 657 nuevos contagios, mucho menos que los 824 del día anterior, pero elevando el total de casos del país a 63.244, con 962 muertes, según la Agencia de Control y Prevención de Enfermedades de Corea (KDCA).
«La tercera ola de propagación del coronavirus está siendo contenida como resultado de la ampliación de las pruebas de COVID-19 y el fortalecimiento de las medidas de distanciamiento social», dijo Sohn Young-rae, un alto funcionario de salud, en una reunión informativa.
Dijo que lo peor para el país parece haber pasado, aunque añadió que es prematuro afirmar que la situación ha cambiado definitivamente dada la disminución del número de pruebas durante Año Nuevo y el fin de semana.
El Gobierno decidió el sábado ampliar la prohibición de reuniones privadas de más de cuatro personas a todo el país y extender unas normas de distanciamiento social sin precedentes en Seúl y las áreas vecinas hasta el 17 de enero.
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