Tegucigalpa, 23 de junio. Los empleados públicos con COVID-19 no se contagiaron en las instituciones del Estado, sino que, en sus lugares de residencia, zona o en su entorno.
Así lo aseguró Fredy Gómez, presidente de la Asociación Nacional de Empleados Públicos de Honduras (Andeph), tras señalar que “este problema no es culpa del gobierno”.
“Es debido a la irresponsabilidad de algunos jefes que llamaron a los compañeros sin investigar antes el lugar donde viven”, cuestionó.
“En muchos barrios y colonias donde viven los empleados están contaminados por el coronavirus y de ahí que se hayan contagiado fácilmente ellos”, afirmó.
“Bajo el fuero de Servicio Civil hay unos 23 mil empleados públicos en el sector centralizado y en todas las instituciones hay compañeros contaminados por COVID-19”, se quejó.
“Pero queremos aclarar que no es en las instituciones desde donde han sido llamados que se contaminaron, pues fue en el entorno, en la zona y en el lugar donde residen”, recalcó.
“El sector salud ha sido uno de los más afectados y muchos compañeros están en sus casas pasando la cuarentena en proceso de recuperación”, afirmó.
La ANDEPH se incorporó a las mesas intersectoriales de trabajo de la reapertura inteligente, desde hace unas tres semanas, recordó.
Protocolos
“Advertimos que, si no se garantizaban los protocolos de bioseguridad a los compañeros, eso podría prestarse para un contagio en masa”, dijo.
Lamentó que hace dos semanas el 20% de los empleados se reintegraron al pilotaje, lo que resultó en un 35% de los compañeros fueron contaminados por el coronavirus”.
Las autoridades de la Secretaría de Seguridad, informaron que por instrucciones del Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager) queda suspendida la primera fase de la reapertura inteligente para el Distrito Central (DC) por la falta de cumplimiento de las medidas de bioseguridad y saturación de la capacidad hospitalaria debido a los altos niveles de contagio.
En ese sentido, siguen vigentes las restricciones de movilidad conforme al último dígito de la tarjeta de identidad y operando sólo los mercados, bancos, farmacias, gasolineras y mercados autorizados.
La primera fase comenzó el 8 de junio y se diseñó en tres regiones que se caracterizan por el impacto del COVID-19 y la densidad poblacional, en donde la incorporación delos trabajadores iba de manera gradual.
Gómez recordó que “el gobierno se concentra en el Distrito Central (DC) pero hemos realizado algunos monitoreos en las regionales y sólo en San Pedro Sula unos 800 compañeros dieron positivo”.
Dato
23 mil empleados públicos están en Servicio Civil
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