Al interno del Partido Nacional se reacciona con indignación después que los medios de comunicación nacional informaran sobre el asesinato de tres de sus dirigentes, uno en San Pedro Sula y dos en Tegucigalpa.
El primer asesinato fue el de don Dagoberto Villalta, quien fue interceptado cuando salía de su vivienda en la colonia Obrera de Comayaguela, la segunda persona muerta es Marcial Martínez de la colonia Villanueva de Tegucigalpa y el tercero es Adelso Martínez, un dirigente patronal de la colonia Jesús de Nazareth, en San Pedro Sula.
Por su parte, el canciller de la República, Lisandro Rosales externó su solidaridad para los familiares de Obdulio Licona, Dagoberto Villalta y Marcial Martínez.
Quien fue más allá, como es su costumbre, es el designado presidencial, Ricardo Alvarez, quien mencionó que esto no es coincidencia, sino que es un plan debidamente planificado (la muerte de los dirigentes nacionalistas). Te puede interesar: https://stn.stnhn.com/ricardo-alvarez-no-es-casualidad-no-es-coincidencia-es-un-plan-debidamente-planificado/
Por último, el presidente del Partido Nacional, Reinaldo Sánchez se pronunció lamentando el asesinato de Dagoberto Villalta y pidió llegar hasta el final con las investigaciones para castigar a los culpables.
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