El gobierno de Estados Unidos, bajo la normativa impulsada por el presidente Donald Trump, ha aprobado una tarifa adicional de 250 dólares (6,587 lempiras) para quienes deseen obtener una visa estadounidense, sin importar si es de turismo, estudio o trabajo.
El nuevo cargo, denominado visa integrity fee (tarifa de integridad de visa), entrará en vigor en el año fiscal 2026 y se sumará a los 185 dólares (L4,874) que actualmente se pagan por la solicitud de visa, lo que elevará el costo total a 435 dólares (L11,462).
¿Quiénes están exentos?
No todos deberán asumir este nuevo impuesto.
Los ciudadanos de países que integran el Programa de Exención de Visas (Visa Waiver Program) están exentos del pago, ya que pueden ingresar a Estados Unidos hasta por 90 días sin necesidad de una visa.
Entre los países beneficiados están:
- Andorra
- Australia
- Austria
- Bélgica
- Brunéi
- Chile
- Croacia
- República Checa
- Dinamarca
- Estonia
- Finlandia
- Francia
- Alemania
- Grecia
- Hungría
- Islandia
- Irlanda
- Israel
- Italia
- Japón
- Letonia
- Liechtenstein
- Lituania
- Luxemburgo
- Malta
- Mónaco
- Países Bajos
- Nueva Zelanda
- Noruega
- Polonia
- Portugal
- Qatar
- Rumania
- San Marino
- Singapur
- Eslovaquia
- Eslovenia
- Corea del Sur
- España
- Suecia
- Suiza
- Taiwán
- Reino Unido
Sin embargo, deben contar con autorización previa del Sistema Electrónico para Autorización de Viaje (ESTA), el cual sigue siendo obligatorio.
¿Quiénes sí pagarán?
Los ciudadanos de Honduras, México, Colombia, Brasil, China, India, República Dominicana, Panamá, Ucrania, entre otros países de Latinoamérica, Asia y Europa del Este, sí deberán pagar el nuevo impuesto si su solicitud de visa es aprobada.
Según el Departamento de Seguridad Nacional, la tarifa adicional solo se cobra en caso de aprobación y el monto aún puede modificarse dependiendo de las condiciones migratorias del país.
¿Por qué este cambio?
El llamado ‘gran y hermoso proyecto de ley’ impulsado por Trump busca restringir y controlar aún más el ingreso de inmigrantes y establecer mecanismos de «selección» más estrictos para quienes desean ingresar legalmente a territorio estadounidense.
Mientras tanto, organizaciones migratorias han expresado preocupación por el impacto que esta medida podría tener en familias latinas, estudiantes internacionales y personas que buscan viajar por motivos médicos o de negocios.


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