TEGUCIGALPA, HONDURAS.
Fue un 16 de junio de 1969 cuando tres astronautas estadounidenses despegaron desde la tierra en el cohete Apolo 11, cuatro días después tuvieron la posibilidad de pisar la Luna.
El 20 de julio, a las 22:56, hora de Washington D.C., capital de Estados Unidos, el Apolo 11 se instaló en las cercanías de la Luna y abrió sus puertas, los astronautas tiraron una escalera de 9 peldaños y descendieron.
Neil Armstrong fue el primero en descender al mismo tiempo que se expresaba con asombro ante lo que estaban viendo sus ojos.
«Estoy al pie de la escalerilla. La superficie parece ser de grano muy fino, cuando se le ve de cerca. Es casi un polvo fino, muy fino. Ahora salgo de la plataforma», mencionó Armstrong.
Cuando el astronauta Neil Armstrong terminó de descender, abrió una compuerta de la nave espacial para que de ahí saliera una cámara de televisión que transmitió el momento a la Tierra y todas las personas pudieran observar el hecho.
Posteriormente, descendió del cohete Edwin Aldrin, mientras que Michael Collins permaneció piloteando la nave; por consecuencia, solo Neill Armstrong y Edwin Aldrin pisaron la Luna, Michael Collins fue parte de la misión, pero no tuvo la oportunidad de sentir la superficie de este planeta en sus pies.
El 20 de julio, a las 22:56, hora de Washington D.C., capital de Estados Unidos, el Apolo 11 se instaló en las cercanías de la Luna y abrió sus puertas, los astronautas tiraron una escalera de 9 peldaños y descendieron.
Neil Armstrong fue el primero en descender al mismo tiempo que se expresaba con asombro ante lo que estaban viendo sus ojos.
«Estoy al pie de la escalerilla. La superficie parece ser de grano muy fino, cuando se le ve de cerca. Es casi un polvo fino, muy fino. Ahora salgo de la plataforma», mencionó Armstrong.
Cuando el astronauta Neil Armstrong terminó de descender, abrió una compuerta de la nave espacial para que de ahí saliera una cámara de televisión que transmitió el momento a la Tierra y todas las personas pudieran observar el hecho.
Posteriormente, descendió del cohete Edwin Aldrin, mientras que Michael Collins permaneció piloteando la nave; por consecuencia, solo Neill Armstrong y Edwin Aldrin pisaron la Luna, Michael Collins fue parte de la misión, pero no tuvo la oportunidad de sentir la superficie de este planeta en sus pies.
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