Unas 1,800 iglesias evangélicas están listas para reabrir anunció hoy Gerardo Irías, presidente de la Asociación de Pastores Evangélicos de Tegucigalpa (APT)
En ese sentido se detalló que los centros religiosos podrán celebrar cultos presenciales a partir de este fin de semana.
Cabe destacar que esto se realizará bajos estrictos protocolos de bioseguridad, como ser gel de manos, mascarillas y distanciamiento entre personas.
Por su parte la Secretaría de Seguridad y el Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager) informaron que se extiende el toque de queda absoluto en todo el territorio nacional. El cual abarca desde el domingo 23 de agosto a las 9:00 p.m. hasta el domingo 6 de septiembre a las 11 p.m.
Además, se determinó ampliar el calendario de circulación los fines de semana autorizando al sistema comercial y económico la atención a la población.
“Desde hace un mes han estado abriendo algunas iglesias pequeñas, pero ya lo haremos este sábado, aprovechando la apertura que han aprobado las autoridades de Sinager”, recalcó.
Salvoconducto para líderes de iglesias
Por otra parte, se detalló que los pastores y sus esposas ya cuentan con los respectivos salvoconductos para circular dentro del país.
“Los pastores y sus esposas ya contamos con los respectivos salvoconductos y damos gracias a Dios por eso, pues un pastor tiene trabajo todos los días visitando a la gente, aunque por ahora ha primado la labor virtual o por las redes sociales y medios de comunicación”, argumentó.
Sin embargo, el trabajo de campo es primordial ya que visitamos hospitales, centros de triaje y otros lugares, agregó el líder religioso.
“Las iglesias están habilitadas con todas las medidas de bioseguridad, respetando claro el número de feligreses que se reúne entre niños y adultos”, según el dirigente religioso.
“En algunas iglesias se reúne el 20% de feligreses, en otras 30% y en el resto 40%, todo depende de lugar donde se encuentra el templo, para el caso en las aldeas que no ha habido mucho COVID-19, llega más gente siempre guardando el 1.5 metro o 2 de distanciamiento entre una persona y otra”, subrayó.
“Siempre se toma en cuenta la capacidad y el tamaño de cada iglesia, por ejemplo, en nuestro templo caben unas 160 personas, pero apenas nos reunimos unas 60 con los servidores”, indicó el pastor.
“En algunos departamentos es más difícil congregarse por la alta incidencia del coronavirus en los mismos, pero esperamos que en nombre de Dios todo vuelva a la normalidad”, finalizó.
COMENTARIOS