Tegucigalpa. En el marco del bicentenario de independencia patria de Honduras, la iglesia Evangélica proclamó el amor y las leyes de Dios para la nación.
El miembro de la Confraternidad evangélica de Honduras, Alberto Solórzano, aseguró que la Honduras próspera y bendecida comienza por el amor a Dios.
Además, aseguró que los creyentes del Creador del Universo se manifiestan en contra del aborto, en contra del matrimonio igualitario (personas del mismo sexo) y le abren las puertas de Honduras al amor y la bendición de la divinidad.
“Honduras es nuestra heredad, Honduras es nuestra casa común, la estimamos, la cuidamos y queremos para nuestra descendencia una patria libre, humana, divina, próspera y modelo de cielo en la tierra”, manifestó.
“Celebramos, agradecidos por los 200 años de República, de independencia, de anhelos, de justicia, de paz, progreso y gozo”, dijo.
“Entramos confiados, de la mano de Dios, a una nueva centuria de cara al futuro, con ánimo resulto, a mejorar, comenzando en nuestro interior”, expresó.
Dios
Solórzano colocó a Dios como el principio de todo para una nación próspera y con una visión de hacer su voluntad en la Tierra.
“La Honduras que soñamos comienza en nuestra mente, comienza con Dios que mora en nosotros por su espíritu, ese espíritu de Dios nos dinamiza para accionar e ir celebrando hechos concretos de amor a Dios, al prójimo, a nosotros mismos y a la patria”, indicó.
“Que Honduras afirme su vocación con Dios, sí a la vida, si al matrimonio bajo el diseño divino, sí a la familia, sí a todo aquello que hace que Honduras siga adelante, sí a Dios que nos sostiene”, concluyó el evangelista.
COMENTARIOS