Debido a los bajos niveles de los embalses de agua, los funcionarios del Servicio Nacional Autónomo de Acueductos y Alcantarillados (SANAA), han programado los racionamientos de agua de 15 a nueve días.
Es que las lluvias durante este año han sido escasas, provocando serios problemas en los cultivos, el consumo humano y finalmente para el combate de incendios forestales y urbanos.
En una entrevista concedida por el jefe de la Región Metropolitana del SANAA, Carlos Hernández, mencionó que la represa Los Laureles se encuentra a un 52% de su capacidad y la Concepción a un 31%.
“La población debe entender que los niveles están muy bajos, estamos a nueve millones y medio en Concepción de 36 que agarra y 4.2 millones en Los laureles de 10.5 que agarra”, indicó Hernández.
La producción de La Tigra en El Picacho está en 290 litros por segundo, cuando su capacidad máxima de producción es de 1,100 litros por segundo.
Se ha mantenido el 75% de la ciudad con Los Laureles y La Concepción. En la zona alta se sostiene con cisternas. Lo que sí ha variado bastante es El Picacho, porque la producción ha bajado.
La zona más crítica en La Tigra es la línea de la comunidad de Jutiapa que abaste El Hatillo, la producción ha bajado tanto que no se puede abastecer más de 20 días en cada sector.
Como sea, los pobladores del Distrito Central están en problemas. Los embalses tienen poco almacenamiento de agua, los incendios y las pocas lluvias, dejarán sin el vital líquido a los capitalinos en pocos meses, a menos que ocurra un milagro.
COMENTARIOS