El Gobierno de Honduras asegura que ha invertido más de 21.000 millones de lempiras en corredores viales que le permiten al país ser el Centro Logístico de las Américas gracias a la modernidad y conectividad de estas carreteras, que acortan distancias y facilitan el comercio, entre otras ventajas.
Una de las primeras tareas del presidente Hernández fue brindarle al país las carreteras que nunca había tenido por el olvido de anteriores gobiernos e incluso algunas que hasta se construyeron tres veces con obras de mala calidad en perjuicio de la economía y comodidad del pueblo hondureño.
En la actualidad, Honduras cuenta con las mejores carreteras de Centroamérica con la finalidad de tener acceso a los mercados para una mejor comercialización de productos, tránsito de mercaderías, turismo, escuelas, hospitales, combustibles y alimentos más baratos.
“Le hemos cumplido al pueblo hondureño: las modernas carreteras son el reflejo de un país que pensó en grande”, destacó el mandatario en la presentación del informe de logros del Gabinete de Infraestructura de 2014-2022, el pasado 19 de octubre.
«Quiero destacar que estas grandes obras de infraestructura las hemos ejecutado con total transparencia, siguiendo los parámetros de la Iniciativa CoST», subrayó Hernández.
Los corredores Logístico, Canal Seco, Agrícola, Lenca, Occidente y Pacífico atraviesan estratégicamente el territorio nacional y suman una longitud de 1.182 kilómetros con una inversión de más de 21.000 millones de lempiras.
Los corredores viales
Durante casi ocho años, a través de la Secretaría de Infraestructura y Servicios Públicos (Insep) e Invest-H se construyeron 1.182 kilómetros de carreteras en corredores estratégicos.
En el caso del Corredor Logístico se pavimentaron 392 kilómetros. Los tramos del Corredor Logístico son: El Progreso-Tela, San Pedro Sula- El Progreso y La Barca-El Progreso.
El Corredor Agrícola cuenta con los tramos Tegucigalpa-Catacamas sección III Río Dulce-Limones, con una longitud de 69,71 kilómetros, y San Francisco de La Paz-Gualaco, que tiene una longitud de 30,7 kilómetros; ambas están a cargo de Insep, a través de la Dirección General de Carreteras.
La sección Gualaco-San Esteban del Corredor Agrícola mide 42,02 kilómetros y cuenta con una estructura de pavimento de doble tratamiento superficial asfáltico sobre una base granular de 20 centímetros de espesor y 20 centímetros de sub-base.
Esta carretera era un sueño anhelado durante décadas por los olanchanos y los pobladores de Colón, pues el tiempo de recorrido antes era de hasta 12 horas y ahora por el moderno corredor se puede llegar en 5 o 6 horas a Trujillo desde Tegucigalpa.
Un canal estratégico
El Canal Seco cuenta con una longitud de 96 kilómetros y atraviesa los departamentos de Comayagua, La Paz y Valle.
Este importante eje carretero hoy en día cobra un mayor valor estratégico con la apertura del Aeropuerto Internacional de Palmerola, que apunta a convertirse en ciudad aeropuerto, uno de los ejes del Centro Logístico de las Américas, y generar desarrollo en el Valle de Comayagua.
Esta moderna vía de cuatro carriles facilitará las conexiones entre el Pacífico y el Atlántico hondureño y con los países vecinos, Nicaragua, El Salvador y Guatemala.
El Canal Seco es parte del Corredor Logístico y tiene como finalidad contar en el país con una vía pavimentada que permita el tránsito, principalmente de carga pesada, entre la zona sur, central y norte del país.
Este proyecto fue concebido para aportar relevantes impactos socioeconómicos y ambientales, como: en la parte social, la generación de empleo durante la construcción, tanto de mano de obra calificada como no calificada; mejor calidad y seguridad de circulación en la carretera reduciendo el potencial número de accidentes.
Entre los aspectos económicos y ambientales, esta vía traerá ahorro en los costos de traslado de productos, incremento de la competitividad de la zona, ahorro en tiempos de viaje y menor contaminación al mejorar la circulación de los vehículos.
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