La playa que «perdió» el sol, es un balneario Camboriu, de Brasil, el cual ha sido apodado el «Dubai brasileño».
Esta ciudad cuenta con apenas 145.000 habitantes y esta situada en el sur de Brasil. A pesar de ser mucho más pequeña que Sao Paulo o Río de Janeiro, el balneario alberga seis de los 10 edificios residenciales más altos de América del Sur.
La mayoría de los rascacielos se encuentran a lo largo de Praia Central, la playa más famosa de la ciudad. Esta concentración de edificios gigantes ha hecho que la playa «pierda» el sol.
Así se ve el atardecer en Praia Central.
Según medios brasileños, después de las dos de la tarde, los rascacielos bloquean la luz del sol y sumergen la playa en la sombra.
La sombra de los rascacielos que se proyecta sobre la playa hace que esta sea más fría y oscura.
«Lo que es peor es que la gente tiene que amontonarse en los estrechos espacios soleados que deja el espacio entre los edificios para tomar el sol. Es un infierno», indicó una residente a medios locales de Brasil.
Sépalo
Pese a que Praia Central perdió el sol, sigue siendo la playa más popular de la ciudad. Incluso en tiempos de Covid-19, ha estado abarrotada en los días soleados, y los bañistas desafían las restricciones de control de la pandemia.
Por otra parte, el científico ambiental y profesor universitario Marcus Polette es uno de los autores de un estudio publicado en 2018, que advirtió que Balneario Camboriu podría enfrentar una grave escasez de agua para 2028 debido al crecimiento y la densidad de su población.
«La población de la ciudad ya aumenta en casi un tres por ciento cada año y esto solo empeorará una vez que la remodelación de Praia Central la haga más atractiva», cree Polette.
En los últimos años se han producido crisis de oferta, especialmente en el pico de las vacaciones de verano:
«Durante este período, la población local aumenta considerablemente con la llegada de turistas y veraneantes; puede llegar fácilmente a más de 800.000 personas», agrega.
«Comparado con esto, la sombra en Praia Central es meramente un problema estético», concluye el científico.
(Fuente: BBC Brasil)
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