Tegucigalpa, 23 de junio. El directivo del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), Juan José Lagos, expresó que el retroceso de la reapertura inteligente obedece a la indisciplina de los hondureños por no cumplir con las medidas de bioseguridad.
La segunda fase de la reapertura inteligente se detuvo porque los casos de COVID-19 aumentan a diario en el país.
En el Distrito Central se cerró la economía en su totalidad porque es la zona que más casos de virus reporta.
“Si estamos preocupados por la situación, esta decisión obedece a la indisciplina, la falta de responsabilidad que hemos visto por parte de la población”, dijo.
“Esto tiene mucho que ver con el nivel de conciencia de lo que significa este virus, esta enfermedad, lo que esto puede causar en las familias y en nuestro círculo cercano”, añadió.
Reiteró “que si es una preocupación porque nos han hecho retroceder, este nivel de contagio que hemos visto todas las noches nos han hecho retroceder, casi al punto de inicio de la reapertura.
Impacto
En ese sentido, Lagos aseguró que “esto tiene un impacto fuerte en el tema económico”.
“En término de vidas sabemos que los hospitales están colapsados, que los centros de atención han colapsado, están haciendo algunas propuestas para sitiar la enfermedad en la capital”, manifestó.
Agregó que “nos preocupa también en términos económicos, pero tenemos que ver la vida misma, cuidar nuestra salud”.
“El tema económico también se debe abordar porque impacta en las Mipymes (Micro, Pequeña y Mediana Empresa)”, concluyó.
Dato
-La reapertura económica en el Distrito Central no reiniciará hasta que la población cumpla las medidas de bioseguridad
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