El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, emitió un indulto en favor de policías y militares que estén en prisión condenados por asesinato en «ejercicio de sus funciones».
De acuerdo con un texto de la Secretaría de la Presidencia, «Policías federales, policías civiles, policías militares y bomberos, entre otros, que en el ejercicio de su función o como consecuencia de ella, hayan cometido crímenes culposos o sin intención, serán contemplados en el decreto».
Por segunda vez en su mandato, Bolsonaro autorizó el indulto de la pena de los agentes de seguridad pública, una medida que también beneficiará a aquellos presos con «problemas graves de salud», entre los que citan los casos de enfermos de VIH/Sida y algún tipo de cáncer.
El decreto también perdona la pena a funcionarios públicos que hayan cometido un delito para «eliminar el riesgo que existe para ellos mismos o para otros», incluso durante las vacaciones, así como militares de las Fuerzas Armadas que hayan cometido delitos culposos en operaciones de Garantía del Orden.
Según la Constitución, los indultos pueden extenderse a brasileños y extranjeros que no hayan cometido delitos con una amenaza o violencia grave, los condenados por crímenes atroces tampoco pueden ser objeto de clemencia presidencial.
El perdón para los agentes de seguridad que maten en el ejercicio de sus funciones es defendido por Bolsonaro desde hace décadas y fue incluido en un proyecto de ley sobre seguridad enviado el año pasado por el Gobierno al Congreso, que finalmente vetó ese punto.
La semana pasada, al anunciar que planea enviar otro proyecto de ley al Parlamento sobre el mismo tema, Bolsonaro le mandó un mensaje “a los hipócritas” que se oponen a esa medida, que son sobre todo la prensa y los organismos de derechos humanos, y aseguró que “no es un permiso para matar, sino el derecho de no morir”.
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