Cientos de miles de franceses salieron a las calles este sábado en varias ciudades, en manifestaciones contra medidas del Gobierno para frenar la pandemia de Covid-19, en particular el denominado pase sanitario.
De acuerdo con medios de prensa, organizaciones sociales a cargo de la movilización cifran en más de 415.000 los participantes en las protestas, que tuvieron su epicentro en la capital, París, aunque también se reportaron en Marsella, Lyon, Nantes, Toulon, Perpignan y Montpellier.
Por su parte, las fuerzas de seguridad cifraron en 237.000 los participantes en cerca de 200 demostraciones y en horas de la tarde dieron a conocer que, hasta ese momento, habían sido pacíficas.
Según el Ministerio del Interior, esta cifra duplica el número de participantes en las primeras marchas de este tipo, que este sábado llegaron a su quinta edición consecutiva.
Los manifestantes valoran que estas y otras medidas del Ejecutivo, como la vacunación obligatoria, son contrarias a sus derechos y rechazan lo que denominan una sociedad de la vigilancia o la discriminación.
Imágenes difundidas a través de medios de prensa y las redes sociales permiten apreciar a personas portando carteles con eslóganes en favor del respeto a la libertad individual y contra las autoridades.
Las protestas se producen jornadas después de la entrada en vigor del pase sanitario, que emiten digitalmente las autoridades y que fue avalado por el Consejo Constitucional.
Se trata de un código QR que permite frecuentar ciertos lugares públicos y que se expide luego de que el individuo ha completado la pauta de vacunación anticovid, muestre un test de antígenos o PCR negativo (con 72 horas de validez), o una certificación de que se sobrepuso al coronavirus SARS-CoV-2.
Según el Gobierno, un problema informático ocurrido este viernes impidió el acceso de usuarios testados negativamente al sitio web desde donde se expide el referido código. Ello provocó largas filas en las afueras de las farmacias para recibir un certificado impreso u otra confirmación de no estar contagiado con el coronavirus.
Las protestas son organizadas por el movimiento Nom Joune, aunque también tuvieron gran participación de los llamados chalecos amarillos y el partido de ultraderecha Los Patriotas, fundado por Florian Philippot, quien antes fue seguidor de la candidata presidencial Marine Le Pen y partido Agrupación Nacional.
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