Los fiscales generales de Honduras, Óscar Chinchilla, y de Colombia, Francisco Barbosa, acordaron este martes en Tegucigalpa fortalecer la ayuda mutua entre ambos países y el intercambio de información para combatir el crimen organizado, el tráfico de migrantes y la trata de personas.
«Hemos analizado cómo el crimen en Latinoamérica compite con el desempleo, la pobreza, la desigualdad», dijo Chinchilla en una comparecencia conjunta tras una reunión con Barbosa, de visita en la capital hondureña.
Chinchilla añadió que, en la reunión con su homólogo colombiano, conversaron sobre «cómo el fenómeno de la globalización, el flujo de capitales y de personas han creado un espacio para manifestaciones que se aprovechan de estas facilidades como el lavado de capitales, el tráfico ilegal de personas y otras manifestaciones de delincuencia transnacional que no pueden ser combatidas de la forma que se han venido haciendo de antaño».
La fiscal hondureña indicó que la «nueva realidad» demanda que los operadores de justicia «unifiquemos nuestros esfuerzos, trabajemos en equipos, mejorando la asistencia judicial reciproca, compartiendo información en tiempo real y continuar desarrollando operaciones binacionales y regionales, para combatir este tipo de fenómenos».
COMPARTEN EXPERIENCIAS
Por su parte, Barbosa señaló que las fiscalías de Colombia y Honduras establecieron «cronogramas de trabajo conjuntos» en temas relacionados a la persecución de delitos que tienen que ver con el tráfico de migrantes y narcotráfico, «en donde tenemos criterios conjuntos de trabajo».
Barbosa añadió que ambas fiscalías compartieron «experiencias con nuestros cuerpos técnicos de investigación».
Honduras es un «país amigo, hermano y compartimos valores en el marco del fortalecimiento el Estado de derecho y la persecución a la criminalidad como elemento central de la confianza que le tenemos que dar a los ciudadanos de nuestros países», enfatizó el fiscal colombiano.
Colombia y Honduras afrontan «retos y desafíos» que conllevan las actividades delictivas relacionadas al tráfico de drogas, criminalidad organizada y tráfico ilícito de migrantes, y garantizar un «combate efectivo» de estos flagelos depende de la «oportuna y fluida cooperación jurídica e intercambio de información» entre ambas fiscalías, señaló el Ministerio Público de Tegucigalpa en un comunicado.
El encuentro de ambas autoridades de justicia busca «afianzar más los lazos de confianza, estrechar los canales de comunicación y sostener reuniones periódicas que posibiliten la entrega de información en forma rápida, segura y valida», añadió el ministerio.
Además, se pretenden mejorar las metodologías de trabajo y los protocolos entre ambos países, «ser más ágiles en la remisión e intercambio de información en el marco de las investigaciones desarrolladas por los delitos antes expuestos y de esta forma tener un impacto simultáneo y conjunto en contra de estas organizaciones criminales», indicó el comunicado.
Ambas Fiscalías plasmarán en una declaración su «compromiso de ir adelante con acciones coordinadas e incluso con operaciones binacionales contra el narcotráfico, el lavado de activos e ilícitos conexos, dado que la naturaleza y auge de este tipo de delitos sobrepasa fronteras y sus efectos aquejan a ambos pueblos», finalizó el Ministerio Público hondureño.
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