Sao Paulo informó este martes nuevas restricciones a las actividades económicas no esenciales para frenar el avance de la pandemia de coronavirus en las próximas semanas.
Según un comunicado del gobierno, todas las regiones del estado brasileño están “en alerta” debido a la evolución de casos, hospitalizaciones y muertes por covid-19.
Durante estos seis días, solamente están autorizadas las actividades esenciales. Por lo tanto, detallaron que se prohíbe el servicio presencial en centros comerciales, tiendas, concesionarias, oficinas, bares, restaurantes, gimnasios, salones de belleza y establecimientos de eventos culturales.
Quedan exentas las farmacias, mercados, panaderías, gasolineras, lavanderías y servicios hoteleros.
El resto de los días, todo el estado permanecerá en la fase amarilla, que es la tercera de las cinco estipuladas en el “Plan Sao Paulo”. La única excepción es la región Presidente Prudente, con 45 municipios que vuelven a la fase roja desde el 25 de diciembre y hasta la próxima reclasificación en enero.
Las autoridades descartan que en el primer mes de 2021 alguna región regrese a la fase verde, la penúltima en la escala de desaceleración de la pandemia.
Actualmente, la tasa de ocupación de las UCI estatales es de un 61,9%, con un aumento al 67% en la región metropolitana de Sao Paulo, según la Secretaría de Salud.
Con 1.388.043 casos de coronavirus y 45.136 muertos, Sao Paulo es el estado más afectado por la pandemia en Brasil, de acuerdo con los datos de las autoridades sanitarias.
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