Tegucigalpa. El embajador de Brasil, en Honduras, Breno de Souza Dias Da Costa, calificó como una “decisión inteligente” la de Honduras de regular la salida de la población cada día, tomando en cuenta el último número de su tarjeta de identidad para evitar la propagación de la pandemia del COVID-19.
El Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager) como una medida de bioseguridad, autoriza a la población movilizarse de acuerdo al último número de su tarjeta de identidad a fin de contener el avance del coronavirus y evitar las aglomeraciones.
En ese sentido, el diplomático dijo que “no hicimos en Brasil como se hizo aquí en Honduras y que me pareció una decisión inteligente de tener esta posibilidad que determinado grupo de personas pueda salir cada día, de acuerdo al número final de su tarjeta de identidad”.
Brasil, con 210 millones de habitantes, es uno de los países más afectados por la pandemia en el mundo y acumulaba hasta ayer más de 85,000 fallecidos y cerca de 2.3 millones de casos de COVID-19.
Dias da Costa dijo que en Brasil “no se regula la salida de las personas, según su último número de identidad, como en Honduras y eso causó problemas en mi país y como en muchas ciudades volvimos a lo que se llama fase cero”.
Actividad
“De manera, que todos los negocios, tiendas, comercios y las actividades no esenciales, estaban prohibidos, entonces cerraban y solamente los hospitales, farmacias, gasolineras y bancos funcionaban en ese periodo”, sostuvo.
“Ahora poco a poco, empezamos a volver a la actividad, en Sao Paolo y Río de Janeiro se abrieron algunos negocios al igual que en otras ciudades importantes del país”, subrayó.
“Brasil se ha preparado para dar apoyo a los micros, pequeños y medianos empresarios, así como otros sectores y son más de 50 millones de brasileños que están recibiendo esta ayuda a fin de mitigar los efectos de esta pandemia que ha afectado al mundo entero”, afirmó.
“Con respecto a la reapertura, tanto en Brasil como en Honduras, hay que considerar todos los datos antes de ponerla en marcha; hay que tomar en cuenta que en mi país como es una república federativa, los departamentos allá tienen autonomía de tomar sus propias decisiones”, explicó.
“En este caso de la reapertura le toca a cada departamento brasileño, decidir a partir de cuándo y de qué manera van a poner en marcha ese proceso de reactivación”, finalizó.
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