El parapentismo es un deporte nacido a finales del siglo XX en Francia por la inventiva de montañeros que querían bajar volando mediante un paracaídas desde las cimas que habían ascendido.
Según investigaciones realizadas, un parapente es un aerodeslizador ultraliviano, que consta de un ala de estructura no rígida o blanda llamada vela o velamen. Esta es construida de tela sintética denominada Rip Stop, cuya trama tiene hilos de refuerzo que frenan eventuales desgarros. En lo que respecta a su funcionamiento básico, se despega y aterriza sobre las piernas del piloto y se controla por medio de un par de mandos (izquierdo y derecho), llamados frenos, que actúan doblando hacia abajo el borde trasero de la vela, modificando de esta forma el perfil aerodinámico de la misma.
Este deporte extremo en los últimos años ha cobrado auge en Honduras, sobre todo para aquellos amantes de las aventuras que buscan salir de lo cotidiano. Indudablemente su práctica requiere de mucha valentía y conocimientos en clima y dirección del aire.
El parapentismo consiste en impulsarse con las piernas, corriendo con el viento a nuestro favor, una vez suspendidos por el aire, nos acomodamos para disfrutar de un paseo extremo por las nubes, que eleva nuestros niveles de adrenalina.
Y aun que parezca un sueño, esta aventura puede realizarse en sitios cercanos a la capital de Honduras, Tegucigalpa. A unos cuarenta minutos los aventureros pueden visitar y realizar esta actividad en la montaña de Capiro, localizada en el municipio de La Villa de San Francisco, Francisco Morazán. También en el Cerro de Monserrat en Yuscarán, departamento de El Paraíso, zona oriental de Honduras.
Este ejercicio, se lleva a cabo en el país, desde el 2014 gracias a la Asociación de Parapentismo de Honduras (APH) la cual fue fundada por un ciudadano de origen canadiense llamado Jeffry Miller quien tiene mas de 15 años de experiencia en surcar los cielos. Dicha asociación fue creada para todos los hondureños que sueñan con volar, para que tengan en cuenta que hay una manera de hacer disfrutar de este deporte extremo de forma segura y con conocimiento.
Sin duda alguna, este tipo de actividades que atraen a chicos y chicas, ha fomentado y fortalecido el turismo en la zona, debido a que año con año llegan turistas nacionales e internacionales que quieren cumplir su sueño de volar.
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