El canciller federal de Austria, Sebastian Kurz, al frente de una coalición conservadora-ecologista desde enero de 2020, anunció este sábado su dimisión en medio de un escándalo de corrupción que le salpica a él mismo, a su círculo más íntimo de colaboradores y a su gobernante partido popular ÖVP.
Le sigue al frente de la Cancillería federal el hasta ahora ministro de Exteriores, Alexander Schallenberg, mientras que el propio Kurz se traslada al cargo de portavoz parlamentario del ÖVP.
“Quiero ceder el espacio para evitar el caos y garantizar la estabilidad. He propuesto al presidente federal (Alexander Van der Bellen) a Alexander Schallenberg como nuevo canciller federal”, dijo Kurz en una declaración ante la prensa.
Con este paso, el hasta ahora jefe del Ejecutivo pretende mantener la coalición de Gobierno con Los Verdes y evitar que se forme una alianza en contra del ÖVP, con los ecologistas y los opositores socialdemócratas, liberales y ultraderechistas.
En cuanto a las acusaciones de la Fiscalía anticorrupción en su contra, Kurz destacó una vez más que se trata de alegaciones “falsas”.
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