Tegucigalpa. El exfiscal general de la República, Edmundo Orellana, es del criterio que los procesos electorales no pueden seguir siendo manejados por políticos porque se corre el riesgo de alterar votos.
Faltan menos de 6 meses para las elecciones generales en el país. El Congreso Nacional aprobó la nueva Ley Electoral y hay importantes reformas que le darán transparencia al proceso.
“Lo que podemos destacar es la integración de las mesas electorales, que ahora se llaman Juntas Receptoras de Votos (JRV) porque ahora están integradas por menos personas, antes eran todos los partidos, ahora solo son 5”, expresó.
“Eso de algún modo disminuye la presión en la mesa; pero sigue el problema fundamental y es que las elecciones están en manos de los partidos, con posibilidades de que las adulteren porque quienes cuentan los votos y quienes dicen quién es el ganador son los representantes de los partidos, activistas políticos”, manifestó.
“Todos sabemos que estos representantes son designados por el órgano central del partido o son nombrados porque los propone un diputado a quien interesa que le cuiden los votos, agregó.
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