TEGUCIGALPA HONDURAS. “La intervención no significa provocar un daño a la Empresa Energía Honduras (EEH)”, consideró a través de Stereo Noticias Matutino, el exfiscal general de la República, Edmundo Orellana Mercado.
Dijo que aquí el problema se plantea por la decisión del gobierno de privatizar el servicio de energía eléctrica parcialmente en manos de esa empresa colombiana, ese es el origen del problema.
Se suscribió un contrato que incumplió el gobierno, entonces no tendría que incumplir la empresa, el problema es cómo, quién y con qué propósito elaboraron el contrato, agregó.
Igualmente, opinó que “no tengo la menor duda que siendo un negocio que deja grandes utilidades a los que la tenían asignada primero que era una empresa donde estaban involucrados bancos privados. Era difícil que se fueran a desprender de ellas simple y sencillamente porque esto generaba ganancias”.
Cree que eso comenzó porque ellos también tenían participación en la empresa que se le otorgó la privatización. Lo que pasa es que poco a poco se complicaron las cosas y ahora lo que se pretende es recobrar o recuperar esa actividad en manos de los que la tenían antes y otros que seguramente quieren participar.
De allí viene el conflicto que hoy se presencia y en donde el gerente de esa empresa desnudó algunos propósitos del gobierno y de algunos que están detrás de ellos que representan los poderes facticos del Estado; pero que todos ellos conspiran en contra del país, tanto el gobierno como la empresa, con sus actitudes de explotación del servicio, denunció.
También, advirtió que las consecuencias del conflicto las sentirá el bolsillo de todo el pueblo hondureño. “El problema, es más grave de lo que se observa, el agujero financiero es un agujero negro, es decir insoldable y que proviene de la decisión que se tomó de sustituir la energía hidroeléctrica por la térmica”.
La ENEE desde hace muchos años ya no es del Estado, es de los acreedores tanto es así que la deuda millonaria que sostiene con ellos es impagable y el gobierno lo admite, finalizó.
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