El surgimiento del nuevo coronavirus en la ciudad de Wuhan, provincia de Hubei, en China, su propagación a otros países y la declaración de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de una Pandemia de salud pública internacional han puesto una vez más el foco en el papel de la aviación en la propagación de enfermedades infecciosas entre humanos.
A pesar de la creciente concientización de los daños que la aviación causa al medioambiente y en el aumento de la «vergüenza de volar», los viajes aéreos nunca han sido tan populares como ahora.
El año pasado más de 4.500 millones de pasajeros abordaron vuelos comerciales en el mundo y la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA, por sus siglas en inglés) predice que el número aumentará a 8.200 millones para 2037.
Con la crisis desatada por la pandemia del nuevo coronavirus, puede haber pérdidas de alrededor del 45% o más de 76.000 mil millones de dólares en el sector aeroportuario, según el más reciente boletín publicado, el primero de abril, por el Consejo Internacional de Aeropuertos (ACI). Se esperaba que esta industria generara alrededor de 172.000 millones de dólares este año.
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En el país se han adelantado operaciones de desinfección de las zonas comunes del aeropuerto, tras ser cerrado por la pandemia.
A pesar de que este es de los pocos aeropuertos en Ámsterdam que no han cerrado en su totalidad su circulación, son pocos los pasajeros que transitan en este. Desde el 17 de abril, cada pasajero debe portar una declaración de salud y se les exige quedarse en cuarentena durante dos semanas.
Las principales aerolíneas en Japón están en proceso de ver una caída de ingresos de alrededor de 500mil millones de yenes, es decir, 4,6 millones de dólares. De acuerdo con el diario ‘Clarín’, el turismo en el país asiático cayó un 93% en marzo, alcanzando el nivel de hace 31 años. Durante este mes, entraron al país solo 193.700 turistas. Desde 1989 no ingresaba a Japón un número menor a 200.000.
Aeropuerto Internacional Libertad, de Newark, Estados Unidos.
El 90% de los vuelos en este aeropuerto se encuentran suspendidos. Antes de la llegada del coronavirus despegaban aviones para alrededor de 69 destinos, ahora las operaciones son casi nulas. Al día se reportaban 139 vuelos, sin embargo en las últimas semanas el promedio ha sido de 15 viajes diarios.
Aeropuerto Internacional de Praga Václav Havel, República Checa.
De acuerdo a los más recientes informes del aeropuerto, el tráfico aéreo en este ha descendido un 88% en el último mes. En las recientes semanas los aterrizajes han sido de checos que estaban en el extranjero, alrededor de 3.600 personas. A la par, las líneas aéreas de transporte han incrementado su servicio un 26% en este aeropuerto y se ha logrado el aterrizaje de 1.200 toneladas de material sanitario.
Aeropuerto Internacional de Ginebra, Suiza.
Decenas de aviones han estado en tierra durante casi un mes en Suiza. Los vuelos que operan, lo hacen dejando un asiento vacío entre cada pasajero y con unas medidas sanitarias estrictas. Aerolíneas suizas han denunciado que sus aviones, aun quietos, necesitan mantenimiento, lo que genera un gasto de dinero que no están compensando. Este ha sido uno de los sectores más afectados, en Suiza y el mundo.
Aeropuerto Internacional de Múnich- Franz Josef Strauss, Alemania
A pesar de que el aeropuerto sigue en funcionamiento como transporte de carga y para retornar a los hogares a los habitantes que se encontraban en otros países, sus operaciones solo alcanzan el 5% de lo acostumbrado. El administrador del aeropuerto, Jost Lammers, dijo en semanas recientes que esta crisis excede el impacto que han tenido hechos como los ataques del 11 de septiembre en Estados Unidos o la crisis financiera mundial de 2008.
Aeropuerto Internacional Logan, Estados Unidos.
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