En Semana Santa, el consumo de pescado seco salado envuelto en huevo, más conocido como las tortas de pescado, es un plato gastronómico, que no falta en la mesa de los hogares de algunos países del mundo, especialmente en Honduras.
El pescado llega a los diferentes mercados del país, capturado por pescadores artesanales, del Golfo de Fonseca en el pacifico hondureño que inician la pesca un mes antes que dé inicio la Semana Mayor.
Y es que el consumo de este alimento se remonta de la época de los fenicios, los romanos y los griegos, antes de Cristo, pues estas civilizaciones aplicaron la salazón como una de las técnicas más antiguas de conservación de los alimentos, entre ellos los pescados.
Sin embargo, En todos los años de la Iglesia Católica han existido diferentes variantes acerca de la abstinencia de la carne. En algunos lugares del mundo, los católicos se abstienen de todo tipo de carnes y productos animales, mientras que en otros, se hacen excepciones y se consumen carnes blancas como el pescado, como por ejemplo el tradicional bacalao.
A la fecha, son muchas naciones alrededor del mundo que cumplen al pie de la letra las tradiciones culinarias del cristianismo, cuyo principal objetivo es la abstención de las carnes rojas, aunque en algunos países se omite esta costumbre.
La sopa de tortas de pescado es un plato que no puede faltar en la mesa de los hondureños en la Semana Santa. Foto: Cortecìa Revista Buen Provecho.
¿LEY O DEVOCIÓN?
Se dice que en un documento del Papa Pablo VI se utilizaba la palabra «carnis», que en el latín se refiere específicamente a los mamíferos y las aves. Es por eso que el pescado ha sido aceptado como comida para el Viernes Santo.
Según el Código de Derecho Canónico de 1983, todos los viernes del año y el período de Cuaresma son días de penitencia en toda la Iglesia.
Aunque en ninguna de las páginas de las Sagradas Escrituras (Biblia) se indica expresamente, que los cristianos evitan la carne durante esas fechas. Tampoco habla de comer pescado, pero ambas tradiciones se han mantenido en conmemoración a la pasión y muerte de Jesús.
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