En menos de una semana se termina la cuarentena nacional decretada por el presidente Iván Duque en el marco de la Emergencia Económica y Sanitaria causada por la pandemia del Covid-19 y Colombia se prepara para lo que será “una nueva normalidad” como la ha definido el propio Gobierno, la cual pasará por el inicio de una nueva fase en la estrategia para tratar la emergencia, “el aislamiento inteligente y productivo”.
Así lo volvió a reiterar el Gobierno, esta vez a través de la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez, que dio luces de cómo se implementará esta apertura progresiva de la economía colombiana, la cual está enfocada a mantener como prioridad la salud de las personas, pero evitar un colapso total de la economía por la pausa indefinida que enfrenta actualmente.
En entrevista con El Tiempo la vicepresidenta dijo que esta será “una apertura progresiva dentro del concepto de ‘aislamiento inteligente y productivo’ porque hay algunas personas que van a mantenerse aisladas: la gente mayor, los menores de 18 años y todos los que puedan hacer teletrabajo”.
“En el mediano plazo, desde el 27 de abril, vamos a reactivar gradualmente algunas actividades buscando el balance entre el menor riesgo para la expansión del virus, mayor impacto positivo en el empleo y mayor impacto positivo en el crecimiento del PIB”, dijo la vicepresidenta.
En este sentido las empresas que reinicien sus labores deben priorizar el teletrabajo, en especial para sus actividades administrativas. Cada ciudad debe ponderar el riesgo y establecer protocolos de salud especiales, los cuales deben ser muy exigentes en ciudades como Bogotá o Medellín, en las que se concentran el mayor número de casos del país.
Destacó que la fórmula del Gobierno para ir abriendo progresivamente la economía se dará por una ponderación de “a menor riesgo, mayor impacto en la generación de empleo; mayor impacto en el PIB y protocolos estrictos, mayor apertura”. Para esto el testeo constante y el seguimiento permanente al seguimiento del virus será fundamental.
Precisó Ramírez que los sectores que primero entrarán en la reactivación de sus actividades serán “transporte, infraestructura, construcción, manufacturas en diversas actividades, alimentos procesados, plásticos, petroquímicos, agroindustria, los que tienen que ver con elementos de la salud, con el sector minero-energético, elementos de aseo”.
Estos sectores deberán instaurar unos estrictos protocolos de seguridad y salubridad, como la toma de la temperatura al ingreso del lugar de trabajo, la instalación de más lavamanos en las empresas para que los trabajadores se laven cada dos o tres horas, y en las que sea pertinente se exigirá cascos protectores para el rostro, para evitar que quienes trabajan se toquen la cara.
Ramírez habló de la necesidad de buscar “un nuevo modelo de capitalismo” el cual implique una “inversión con rentabilidad para el capital y con rentabilidad social”, que le permita a las personas tener empleo formal y seguridad social para sobre llevar la vejéz. Afirmó que el propósito del Gobierno durante la crisis ayudar a estos sectores, concentrándose en fortalecer el empleo formal usando estrategias como “estimular la productividad de los trabajadores mediante bonos por productividad en función del aumento de las utilidades de las empresas”.
Por otro lado, el Gobierno a través de su portavoz oficial de comunicaciones también precisó que en el sector del transporte público, por ejemplo, solo se operará al 35% de la capacidad, en especial en los sistemas masivos de transporte como Transmilenio en Bogotá.
Además, quedó descartada la apertura del aeropuerto El Dorado en Bogotá y en general de los vuelos internacionales. Los vuelos locales, por su parte, quedarán supeditados a una nueva evaluación después del final de la cuarentena para determinar si volverán a entrar en funcionamiento o se mantienen suspendidos.
Se mantendrán las restricciones para niños y jóvenes, quienes no podrán volver a colegios y universidades en principio hasta el 31 de mayo, los adultos mayores de 70 años también mantendrán el confinamiento, aunque para ellos el plazo es indefinido. Personas con condiciones de salud preexistentes que aumenten su riesgo de contagio y de complicación tendrán que seguir aisladas.
Como ya lo había dicho el presidente Iván Duque, los bares, discotecas, restaurantes, estadios, no serán reabiertos después del 27 de abril. Tampoco se podrá realizar ningún tipo de evento masivo como festivales o conciertos, pero tampoco reuniones sociales que convoquen gran número de personas, como matrimonios y fiestas.
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