Tegucigalpa, 28 de octubre. El canciller Lisandro Rosales, sugirió al presidente de El Salvador, Nayib Bukele, que debe pensar en el desarrollo de los pueblos y “no jugar con estas cosas”.
El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández y de Nicaragua, Daniel Ortega, firmaron ayer en Managua, el Tratado Integracionista del Bicentenario que tiene como objetivo trazar una ruta de paz y prosperidad para ambos pueblos en el Golfo de Fonseca y mediante el cual los dos países delimitan sus fronteras en el Mar Caribe y el Océano Pacífico.
Nicaragua reconoció, tras 29 años, que su frontera marítima en el Golfo de Fonseca es con la República de Honduras, ratificando de esta forma el fallo dictado en 1992 por la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
Inmediatamente después, Bukele escribió en sus redes: “Si yo hubiera firmado un idéntico tratado geográfico con Ortega ¿que estuvieran diciendo los demócratas de la Casa Blanca?”
Mesas
En ese sentido, Rosales invitó al mandatario salvadoreño “a que nos sentemos a la mesa a definir la frontera marítima con El Salvador”.
“Los criterios de él los respeto, pues es un Presidente, pero debe pensar en el desarrollo de los pueblos y no estar jugando con estas cosas”, reiteró.
En ese sentido, Rosales describió al “acuerdo como histórico es una definición que tenía 30 años de estar postergada, por lo que llegó el momento de llevar la paz y seguridad al Golfo de Fonseca”.
Aseguró que “el Tratado con Nicaragua es un acuerdo de país. Quien lo vea de otra manera es un mal hondureño. Hay que evitar suspicacias y la politiquería barata en estos temas. Debemos pensar en el desarrollo del Golfo de Fonseca de manera sostenible”.
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