TEGUCIGALPA-HONDURAS. El Tribunal Disciplinario del Ministerio Público, canceló la tarde de este miércoles a la médico forense, Julissa Villanueva, del cargo que desempeñaba en el Ministerio Público.
La decisión obedece a la «violación y revelación de secretos» que la patólogo habría hecho en perjuicio de la institución para la que trabajaba. Como ya se sabe, Villanueva ha cuestionado presuntas irregularidades que el MP realizó durante la investigación de crimines sonados en el país.
Es por ello, que la resolución del Tribunal Disciplinario de ese ente investigativo determinó procedente interponer la sanción disciplinaria de la cancelación al acuerdo de nombramiento en virtud de existir dos resoluciones firmes emitidas por ese órgano con poder disciplinario registradas por la misma causal. Esto, a solicitud de sanción por falta grave presentada por la Supervisión Nacional del MP.
Acta de notificación a la médico forense Julissa Villanueva
Acuerdo definitivo
Por otro lado, el Tribunal Disciplinario instruyó a la División de Recursos Humanos para elaborar el acuerdo definitivo de cancelación por despido a la servidora, Julissa Villanueva, el cual deberá remitir sin dilaciones al fiscal general de la república, Óscar Chinchilla para su aprobación. Cabe resaltar que según reza el documento oficialm, la resolución es de manera inmediata conforme a lo que mandan los estatutos del MP.
Por otro lado, la afectada ha reaccionado sobre la nueva medida en su contra asegurando que «me quieren meter a la cárcel por supuestamente violar secretos, me quieren callar del todo».
También agregó que «no les basta despedirme ahora vienen requerimientos por violar secretos; secretos de quienes asesinaron a la agente, Sherill, de que atropellan los derechos laborales de los empleados, de que lo decomisado en el restaurante chino no era perro, que han faltado a la verdad”.
Demanda
En respuesta ello, Villanueva aseguró que va a interponer una demanda a nivel internacional porque en Honduras no hay Estado de Derecho y se siente indefensa y sin garantías. «Estoy indignada… ¡uf! mejor respiro profundo. Me ordeno mentalmente”, expresó la médico patóloga a un medio local.
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