Este día autoridades de El Salvador ordenaron la captura de su expresidente, Salvador Cerén Sánchez por suponerlo responsable del desfalco de fondos estatales con el cobro de sobresueldos.
La Fiscalía general ha detenido a exministros y ex viceministros de su Gobierno sin embargo el paradero de Sánchez Cerén, exlíder del partido Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), es desconocido desde que salió del país en 2020. Así lo confirmó por medio de su cuenta de Twitter el presidente Nayib Bukele.
El fiscal general, Rodolfo Delgado, ha informado que los sospechosos serán acusados de lavado de dinero, «Todas estas personas contribuyeron al desfalco que le costó más de 350 millones de dólares al Estado salvadoreño», afirmo en una rueda de prensa, asi mismo detalló que el dinero era entregado en casa presidencial de forma mensual y este constituía una adición al salario que por ley debían devengar por ejercer la funciones públicas».
Presuntamente los hechos ocurrieron entre 2009 y 2014 durante el Gobierno de Mauricio Funes, que también enfrenta cargos judiciales pero está asilado en Nicaragua desde 2016, en ese entonces, su sucesor, Salvador Cerén Sánchez era vicepresidente y según reportes de la prensa salvadoreña, Sánchez Cerén también se encuentra en Nicaragua.
La investigación, se inició en 2019 y es una derivación del caso denominado «Saqueo Público» de 2009-2014 cuando la Asamblea Legislativa aprobó 80,8 millones de dólares para un período de cinco años en concepto de «gastos reservados» de la presidencia.
al final del período » el desfalco» ascendió a 351 millones de dólares por las transferencias de fondos que fueron autorizados por el ministerio de Hacienda, sin la debida autorización del Congreso.
El secretario general del FMLN, Óscar Ortiz, denunció que «el actual grupo gubernamental, valiéndose de instrumentos del Estado, está actuando de manera ilegal para consolidar el mecanismo de persecución política» concluyó.
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