Preocupado por el aumento de las matanzas en Estados Unidos, el presidente Joe Biden, prohibió este lunes la venta libre de las llamadas “armas fantasma”, que son los kits que se venden por internet para armar pistolas, revólveres fusiles en casa, que no tienen regulación y son muy difíciles de identificar y rastrear.
Biden también nombró a Steve Dettelbach, un ex fiscal de Ohio, para liderar la oficina de Control de Alcohol, Tabaco, Armas de fuego y Explosivos. El primer candidato para ese puesto sensible había sido retirado por el presidente en medio del rechazo de los republicanos en el Senado.
Estos anuncios suceden mientras la violencia y el delito ha escalado en Estados Unidos, presionando a Biden para que tome medidas sobre el tema. La disposición aborda un problema clave en el seguimiento y la regulación de las “armas fantasma” porque ciertas piezas utilizadas para ensamblar las armas a menudo se compran por internet y no se clasifican oficialmente como armas de fuego.
“El Departamento de Justicia de los Estados Unidos ha emitido una regla final para frenar la proliferación de «armas fantasma», armas de fuego no serializadas y de fabricación privada que las fuerzas del orden están recuperando cada vez más en las escenas del crimen en ciudades de todo el país”, dijo la Casa Blanca en un comunicado.
Solo el año pasado hubo unas 20.000 presuntas “armas fantasma” reportadas como recuperadas por la policía en investigaciones criminales, un aumento de diez veces con respecto a 2016.
Debido a que las “armas fantasma” carecen de los números de serie marcados en otras armas de fuego, a la policía le toma mucho tiempo rastrear un arma de ese tipo encontrada en la escena del crimen hasta identificar a un comprador individual.
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