Más de 3.000 trabajadores de la salud han muerto a causa del coronavirus en todo el mundo y los gobiernos deben ser responsabilizados de sus muertes, dijo hoy el grupo de derechos humanos Amnistía Internacional.
Rusia, Reino Unido y Estados Unidos encabezan la lista de países con la mayor cantidad de muertes de trabajadores de la salud, según el informe “Global: Health workers silenced, exposed and attacked”.
De 79 países examinados, Amnistía descubrió que:
En Rusia, 545 trabajadores de la salud habían muerto por covid-19.
Reino Unido registró 540 muertes, incluidos 262 trabajadores sociales.
Estados Unidos tiene 507 muertes de trabajadores de salud.
“Los países que aún no han visto lo peor de la pandemia no deben repetir los errores de los gobiernos cuya falta de protección de los derechos de los trabajadores ha tenido consecuencias devastadoras”, dijo Sanhita Ambast, investigadora y asesora de derechos económicos, sociales y culturales de Amnistía Internacional.
Amenazas por hablar
El informe dice que los trabajadores de la salud y los trabajadores esenciales se han enfrentado a represalias por parte de las autoridades después de ser amenazados con arresto, violencia, falta de equipo de protección personal (EPP) y, en algunos casos, falta de pago por su trabajo.
Dos doctoras rusas enfrentan represalias luego de quejarse de la falta de EPP. Una de ellas fue acusada bajo las leyes de noticias falsas de Rusia y multada hasta con US$ 1.443; mientras que la segunda enfrenta procedimientos disciplinarios que podrían resultar en su despido, descubrió Amnistía.
“Los trabajadores de salud en primera línea son los primeros en saber si la política del gobierno no está funcionando; y las autoridades que los silencian no pueden afirmar seriamente que están dando prioridad a la salud pública”, agregó Ambast.
Elegir “entre la muerte y la cárcel”
Un médico egipcio no identificado dijo a Amnistía que los médicos que denuncian sus condiciones se enfrentan a amenazas a su vida; e interrogatorios por parte de la Agencia de Seguridad Nacional, así como sanciones.
“Muchos (médicos) prefieren pagar por su propio equipo personal para evitar este agotador estira y afloja. (Las autoridades) están obligando a los médicos a elegir entre la muerte y la cárcel”; dijo a Amnistía el médico egipcio no identificado.
Amnistía dijo que es probable que las 3.000 muertes sea un subregistro debido a la falta de informes; y las diferencias en la forma en que los países cuentan y recopilan datos.
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