El prestigioso físico, filósofo y epistemólogo argentino Mario Augusto Bunge murió este martes a los 100 años en la ciudad canadiense de Montreal.
Bunge, considerado uno de los más importantes científicos argentinos, estaba casado con la matemática Marta Cavallo y tenía cuatro hijos.
Nació el 21 de septiembre de 1919 en Buenos Aires, pero en 1963 se exilió. Tras pasar por varias universidades extranjeras, en 1966 ocupó la cátedra Frothingham de Lógica y Metafísica en la Universidad McGill en Montreal.
Proveniente de una familia alemana emparentada con españoles del País Vasco y de Asturias, a los 18 años, Bunge estudió física y matemáticas en la Universidad Nacional de La Plata y se doctoró en Ciencias Fisicomatemáticas. También fue cofundador de la Asociación Física Argentina, fundador de la revista de filosofía Minerva (1944-45) y cofundador de la Asociación Rioplatense de Lógica y Filosofía Científica (1956).
Reconocimientos
Recibió 21 ‘honoris causa’ y cuatro profesorados honorarios en universidades europeas y estadounidenses. Entre todos los reconocimientos que obtuvo a lo largo de su carrera, en 1982 fue galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de Humanidades y Comunicación.
«Mario Bunge ha contribuido al análisis y fundamentación de teorías en el campo de las Ciencias Naturales y Sociales con una larga serie de trabajos que vienen influyendo grandemente en la investigación que se realiza en estas materias tanto en España como en Hispanoamérica», destacó entonces el jurado.
El científico, que siempre se mostró contrario a las pseudociencias, era miembro desde 1984 de la Asociación Estadounidense para el Avance de la Ciencia y desde 1992 de la Royal Society of Canada.
Entre sus abundantes obras destacan títulos como ‘La ciencia: su método y su filosofía’, ‘Teoría y realidad’, ‘Filosofía de la física, Epistemología, Materialismo y ciencia’, ‘El problema mente-cerebro’ o ‘Economía y filosofía’.
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