Tegucigalpa, 30 de junio. La municipalidad del Distrito Central (DC) informó que hay unos 100 barrios y colonias capitalinos en alto riesgo por lo que instó al pueblo a mantenerse alerta, ante las lluvias.
La Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) decretó alerta amarilla por 48 horas para los municipios del Valle de Sula por riesgo a inundaciones debido a la crecida del río Ulúa y sus afluentes.
De igual manera, emitió “alerta verde para los departamentos de Santa Bárbara, Copán, Ocotepeque, Lempira, Intibucá y La Paz. por riesgos a deslizamientos y para Valle por el aumento del cauce del rio Goascorán”.
Monitoreo
El vocero municipal, Sady Bueso, dijo que “la alcaldía se prepara no sólo en temporada de lluvias, sino durante todo el año, con el objetivo de evitar inundaciones y otras afectaciones en las ciudades gemelas de Tegucigalpa y Comayagüela”.
Señaló que “en ese sentido, a través del Comité de Emergencia Municipal (Codem), se mantiene un monitoreo permanente en quebradas y ríos a fin de verificar el volumen de agua y en zonas de alto riesgo para constatar que no haya deslaves o deslizamientos que vayan a causar problemas a los habitantes”.
“Asimismo, a través del sistema de Alerta Temprana se han instalado pluviómetros en zonas estratégicas para que puedan medir el caudal de las aguas y dar aviso oportuno para que la gente pueda ser trasladada en caso de una afectación a albergues que se mantienen listos”, puntualizó.
“Por ahora, gracias a Dios no hay ningún damnificado en los albergues, pero hay capacitaciones constantes al personal de los Comités de Emergencias Locales (Codeles) integrados por habitantes de las zonas vulnerables de la capital”, enfatizó.
“En ese sentido, hay como 180 colonias y barrios que están riesgo y unos 100 en alto riesgo, como producto de deslizamientos, porque están ubicados cerca de quebradas o ríos que pueden causar inundaciones”, afirmó.
“Como producto de estas lluvias se han atendido como diez colonias que experimentaron pequeños deslaves y saturaciones de suelos”, informó.
“Pero la construcción de obras de mitigación como canalización de ríos y quebradas, limpieza de tragantes y la construcción de la bóveda en la quebrada de El Sapo, ha permitido que la capital soporte las lluvias, tal como sucedió con las tormentas tropicales Iota y Eta”, concluyó.
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