Es una buena noticia autorizar a la Secretaría de Salud (Sesal) el uso de la vacuna rusa Sputnik V, reconoció el pediatra Ernesto Dala.
La Agencia de Regulación Sanitaría (ARSA) informó que se ha autorizado a la Sesal el uso de emergencia en Honduras de la vacuna rusa Sputnik V para combatir el COVID-19.
En ese sentido, Dala dijo que “el problema que hemos experimentado nosotros es que no ha habido suministro de vacunas, por lo que al recibir la autorización para la Sputnik es una buena decisión”.
Precisó que “en esa vacuna se utiliza una tecnología muy conocida denominada vector viral, en la que han usado un virus similar al COVID-19 para crear memoria”.
“Además, la eficacia de la vacuna rusa es bastante alta, es del 92%, otra de las características es su buen manejo en relación con la red de frío que no es complejo, pues puede estar preservada entre 2 y 8 grados centígrados como la mayor parte de las vacunas que se aplican en el país”, destacó el galeno.
Eficiencia
“Asimismo, es una vacuna que ha demostrado una alta eficiencia y aunque no haya sido reconocida por la Administración de Medicamentos y Alimentos de los Estados Unidos (FDA), en Europa ha sido reconocido su 92% de eficacia e incluso evita complicaciones en casos graves”, subrayó.
Explicó, no obstante, que “las vacunas de Pfizer y Moderna rondan el 94% y 94.5% de eficacia, es decir, son únicamente 2% de diferencia con la rusa”.
Reveló que “las vacunas deben estar preservadas a -70, pero una vez que se sacan de la red de frío, la de Pfizer permanece activa cinco días y la Moderna, hasta 30 días, pero eso vuelve más complejo el manejo”.
“La vacuna de Moderna fue creada para Estados Unidos y la de Pfizer tiene una demanda muy alta. En cambio, la rusa a principios no tenía mucha difusión y los gobiernos no estaban muy interesados en ella y esa fue la oportunidad que Honduras aprovechó”, finalizó.
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