Una enfermera rusa quien atendía pacientes con COVID-19, decidió quitarse el uniforme y continuar su trabajo solo con su transparente equipo de protección. El calor la había sofocado.
Sucedió en el Hospital Clínico Regional de Tula, a 160 kilómetros al sur de Moscú.
De a cuerdo con medios locales, como Newstula.ru, la fotografía tomada y difundida por un paciente alertó a las autoridades del centro asistencial.
La instantánea muestra a la joven de 20 años atendiendo a los paciente cubierta solo con el traje de protección y su ropa interior expuesta.
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Quien tomó la foto afirmó que “no hay quejas” de los pacientes por la enfermera y su vestimenta…, o la falta de la misma.
Mientras, las autoridades del hospital sancionaron a la enfermera por “incumplimiento de los requisitos de vestimenta médica”. Ella sostuvo que no se dio cuenta de cuán transparente era la bata que usó cuando atendía a las personas.
La enfermera no fue identificada, pero recibió el apoyo de varios usuarios.
Un lector del diario Tula News felicitó a la joven y señaló: “Al menos alguien tiene sentido del humor en esta triste y sombría realidad”.
Otra lectora también comentó : “Ella levantó el ánimo de los pacientes”.
Hasta el 20 de mayo la cifra de muertos por coronavirus en Rusia ascendió a 2972; mientras que el número de infectados llegó a 308 705.
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