TEGUCIGALPA, HONDURAS
Talanga vivió tarde inolvidable al convertirse en el escenario de un masivo cierre de campaña, donde miles de vecinos llenaron las calles para recibir a Papi a la Orden y al candidato a alcalde Roosevelt Avilés, en una demostración de fuerza, esperanza y decisión rumbo al 30 de noviembre. La ciudad confirmó que quiere un cambio y que está lista para hacerlo realidad.
Roosevelt Avilés reafirmó su compromiso de recuperar el brillo de Talanga, ordenarla, modernizar sus servicios y devolverle a la municipalidad la cercanía con la gente.
Papi a la Orden, en su mensaje, enfatizó que con la descentralización como eje central de su Plan de Gobierno “Honduras vamos a estar bien”, Talanga recibirá las obras que por años han sido postergadas: mejores servicios, inversión social y proyectos que generen desarrollo real para sus comunidades.
Ambos candidatos coincidieron en que la fórmula para que Talanga avance es simple: Papi en la presidencia y Roosevelt en la alcaldía, una alianza de trabajo que permitirá ejecutar proyectos de infraestructura, mejorar la red vial, y fortalecer la salud y educación con decisiones que se tomarán desde el territorio y no desde escritorios en Tegucigalpa.
En su mensaje, Papi también llamó a apoyar la planilla completa de diputados por Francisco Morazán, reconociendo que para hacer los cambios profundos que Honduras necesita, se requiere un Congreso comprometido con la visión de desarrollo y no con intereses particulares.
El cierre de campaña en Talanga dejó un mensaje claro y poderoso:
El municipio está listo para dar el paso. Está listo para cambiar. Está listo para ganar este 30 de noviembre.
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