Tegucigalpa. El Sistema de Centros de innovación Tecnológica y Agrícola (SCITA) actualmente desarrolla las jornadas de Escuelas de Campo con pequeños y medianos productores de vegetales orientales del Valle de Comayagua, en el marco del proyecto “Enemigos Naturales para la disminución de uso de agroquímicos en vegetales orientales”.
El Proyecto Enemigos naturales para la disminución de uso de agroquímicos en vegetales orientales, fue presentado por SCITA y ganó la categoría de soluciones innovadoras en una convocatoria a nivel nacional que realizó en agosto del 2020 el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) con el objetivo de identificar y financiar el desarrollo e implementación de soluciones prácticas e innovadoras que atiendan el desafío del COVID-19 en el sector agropecuario de Honduras.
La Escuela de Campo está integrada por una parte teórica y otra practica a fin de que el productor pueda identificar las plagas de sus cultivos, así como sus enemigos naturales o controladores benéficos y que puedan utilizar esta medida para reducir las plagas con mayores beneficios.
Todo esto forma parte de la biotecnología que agrupa todo el conjunto de técnicas, procesos y métodos que utilizan organismos vivos como las bacterias, hongos y virus partes de ellos o sistemas biológicos derivados de los mismos y al utilizar los enemigos naturales que se encuentran en las áreas productivas de los agricultores se estaría respetando el ecosistema. Desde el punto de vista de control conservativo, al usar especies nativas se evita alterar el ecosistema con la introducción de organismos exóticos o no nativos que a largo plazo podrían convertirse en una plaga explicó Paola Flores, investigadora de SCITA a cargo del proyecto.
Hace unos meses especialistas del centro SCITA ubicado en Comayagua, realizaron diferentes visitas para el levantamiento de una línea base con el objetivo de conocer la realidad de los productores, en este procedimiento se hicieron entrevistas y se aplicaron encuestas que permitieron recopilar información sobre los planes de manejo que son utilizados por los productores para el control de plagas.
Vegetales orientales en Comayagua
La investigación de SCITA se produjo debido a una de las necesidades de la zona debido a que en los últimos años los productores de este tipo de cultivos han reportado un descenso de la producción y comercialización por problemas de plagas originarias del caribe afectando los rendimientos por parcela de tierra sembrada.
En el valle de Comayagua, existen alrededor de 500 productores de estos cultivos y hay más de 2,000 manzanas de área en producción. Adicionalmente existen aproximadamente diez empresas exportadoras que abastecen el mercado de Estados Unidos de cultivos orientales.
Según investigaciones realizadas por organismos gubernamentales, una de las principales debilidades identificadas por los productores es el problema por las plagas cuarentenarias las cuales dificultan la aceptación del producto al momento de la comercialización.
Flores, informó que la próxima jornada de capacitación se llevará acabo el 26 de agosto con otro grupo de agricultores a quienes previamente se visitó y estuvieron anuentes a participar en el proyecto.
“esta capacitación fue un beneficio pues desconocía muchas cosas sobre los insectos benéficos y esto le ayuda a uno a aprender para ir probando estas opciones y así ir viendo los resultados en nuestras parcelas” dijo Selvin Rivera, productor de vegetales orientales del municipio de San Gerónimo en Comayagua.
Durante las Escuelas de Campo se ha contado con el apoyo de la empresa POPOYAN que produce e importa insumos para el manejo integrado de plagas y enfermedades de los cultivos.
“Somos una empresa que respalda los procesos de formación para una agricultura sostenible con el objetivo de contribuir a la producción de la zona generando mejores cantidades y calidad del producto, para un beneficio de las familias productoras que se dedican a este rubro” explicó Víctor Godoy, técnico de POPOYAN.
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