Washington D. C. Estados Unidos. Las declaraciones en cuanto a las guerras del futuro de la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, generaron revuelo en varios países de América Latina en relación con la cantidad de agua dulce que hay en las costas de países como Argentina, Colombia y Brasil.
Kamala Harris sostuvo que a lo largo de los años las guerras que se han peleado fueron por el petróleo e incluso lanzó una predicción y dijo que en poco tiempo las peleas serán por el agua. Dichas declaraciones las hizo en compañía del secretario de la Armada estadounidense,Thomas Harker, lo que levantó sospechas e incluso teorías sobre cuánto faltará para que la GUERRA por el AGUA comience.
«Durante años las guerras se han peleado por el petróleo, en poco tiempo será por el agua potable», aseguró la funcionaria del Gobierno de Estados Unidos.
El plan de EU para ‘cuidar su agua potable’ y la infraestructura
Harris se encontraba en Oakland donde presentó el plan de Joe Biden, presidente de Estados Unidos, de empleo e infraestructura. Fue gracias a las referencias que hizo la vicepresidenta de las plantas de agua potable lo que la impulsó a reflexionar sobre las próximas guerras.
“Debemos abordar las desigualdades en el acceso al agua potable, en los niveles estatales federales locales. Debe comprender las oportunidades para construir una infraestructura de respaldo en torno al agua”, expresó Harris.
El agua dulce solo representa el 2,5% de los 1.386 millones de kilómetros cúbicos de reservas de agua que hay en el mundo. De ese porcentaje se debe descontar la parte que corresponde a polos y glaciares que representa casi el 70%. Otro porcentaje representativo es el que se encuentra en ríos no potabilizados.
El proyecto del escritorio fue aprobado en los últimos días de la administración de Donald Trump y se le dio una gran importancia desde el gobierno estadounidense. El escritorio tiene madera, cobre y clavos tomados de diferentes buques de guerra. La vicepresidenta expresó su satisfacción por recibir el simbólico escritorio que cuenta con intrincadas tallas de un águila y estrellas en el frente. La construcción había comenzado el 4 de enero y demoró casi tres meses.
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